Saltos, rápeles, toboganes y curiosos pasajes se suceden en este amplio y caudaloso río de montaña. Al poco de comenzar, varios caos de grandes rocas dan paso a una impresionante gorga, donde el agua se concentra a lo largo de estrechos y bellos pasillos inundados. Todo ello hace que el descenso de la Boca del Infierno sea una experiencia de barranquismo completa, muy acuática y de un valor estético excepcional.